La taxidermia es una técnica que consiste en la manipulación de los cadáveres de los animales para conseguir un aspecto parecido al que tendrían si estuvieran vivos en su propio medio.
Históricamente ha sido un instrumento muy útil para el estudio de las Ciencias Naturales. Antiguamente los institutos no contaban con filmaciones, y los dibujos y fotografías muchas veces no daban sensación del aspecto real del animal.
En un principio, la disección de los animales era un proceso totalmente artesanal, los animales eras desollados y el esqueleto y sobretodo el cráneo se limpiaba y servía de armazón para el montaje de la pieza. Las vísceras eran sustituidas por relleno de virutas de madera o fibra vegetal. El conjunto se sustentaba con un armazón de madera o alambre. El taxidermista era un auténtico artista que esculpía con materiales muy simples una estructura donde montaba la piel que previamente había sido curtida para evitar su deterioro.
Actualmente se trabaja más con moldes de poliuretano prefabricados que facilitan la labor del taxidermista y permiten una gran fidelidad al aspecto natural del animal. Es así como se consiguen una gran variedad de posturas diferentes de los animales disecados. El taxidermista, después de preparar la piel, monta el animal en mucho menos tiempo.
En cualquier caso la técnica de la taxidermia requiere un gran sentido artístico y una gran paciencia para conseguir “devolver a la vida” estos cadáveres de animales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario